La patrullera Andrea Cortés, reconocida como la primera agente de la policía trans en el país, fue destituida de su cargo. ¿La razón? La patrullera fue denunciada por el hurto de una crema para el rostro en un establecimiento comercial. A través de un video revelado por el almacén, se ve a la agente de la Policía tomar la crema durante un descuido de la vendedora que ingresa a una bolsa y luego se retira del lugar sin pagar por el producto. La denuncia fue realizada por la vendedora. Según el fallo, “Se identifica que la funcionaria de la Policía (la patrullera Cortés), en un descuido de la señora (la regente de la farmacia), toma la crema del contorno de ojos y la mete en una bolsa (...) y se retira sin pagarla”.
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La Policía señaló que Cortés cometió una falta muy grave “al apropiarse de pertenencia de particular en beneficio propio”, razón por la cual quedó destituida e inhabilitada por 11 años para ejercer cargos públicos. Por su parte, el abogado de la patrullera Ellis William Reinel no van a apelar la decisión, sino que van a presentar la revocatoria del fallo con el fin de “que sea la Procuraduría quien se pronuncie ante el caso”. Los hechos se habrían registrado el pasado 23 de septiembre en el centro comercial Titán Plaza.
