La compañía nacional de ferrocarriles francesa SNCF sufrió un “ataque masivo y coordinado” este viernes 26 de julio, horas antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos París 2024. La empresa anunció que su red de trenes de alta velocidad (TGV) fue “saboteada” con incendios provocados, con el fin de paralizar la operación de estos, afectando así a 800.000 viajeros.
Miles de personas que se dirigían a las justas olímpicas se vieron afectadas, pues no pudieron realizar sus respectivos trayectos, razón por la cual fue necesario que buscaran otros medios para llegar a su destino.
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De igual forma, la compañía informó que la circulación de los trenes de alta velocidad se vio alterada en las líneas Atlántica, Norte y Este, y advirtió que la situación podría prolongarse por este fin de semana.
Cabe resaltar que el ataque también afectó a los trenes de la filial Eurostar, que conectan a París con Bruselas, Ámsterdam y Londres, ya que un 25% de la operación fue cancelada para el viernes, sábado y domingo, según informó la empresa.
Las autoridades francesas refuerzan la seguridad en París
La Fiscalía de París anunció que la Jurisdicción Nacional de Lucha contra la Criminalidad Organizada (Junalco) abrió una investigación por degradación de bienes para "atentar contra los intereses fundamentales de la Nación".
Por otro lado, el primer ministro francés, Gabriel Attal, se pronunció tras los hechos y pidió prudencia a los ciudadanos respecto al ataque, pues las autoridades están investigando los hechos y adelantando acciones para garantizar la seguridad de la ciudadanía.
"Nuestros servicios de inteligencia y nuestras fuerzas de seguridad fueron movilizados para encontrar y castigar a los autores de estos actos criminales", afirmó.
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