Los ordenadores y potenciar las capacidades humanas ha sido un recurso recurrente en las narrativas de ciencia ficción durante décadas, pero podría hacerse realidad gracias a la empresa Neuralink. Neuralink es una empresa de neurotecnología estadounidense dedicada al desarrollo de interfaces cerebro-computadora y fue fundada por Elon Musk, hoy dueño de Twitter y también cabeza de empresas revolucionarios como Tesla y SpaceX. Actualmente Neuralink desarrolla un dispositivo capaz de tratar pacientes que sufran de discapacidades causadas por desórdenes neurológicos mediante estimulación cerebral directa. Según el propio Elon Musk, a largo plazo se busca lograr una simbiosis total de la inteligencia artificial con la inteligencia biológica y de esta manera, expandir las capacidades humanas. Para ello, actualmente lleva a cabo experimentaciones en animales en conjunto con la Universidad de California.
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La tecnología de Neuralink
El implante neuronal desarrollado por esta empresa consta de unos micro hilos que irán conectados al área del cerebro encargado de los movimientos. La perspectiva de Neuralink es que a medida que esta tecnología se desarrolle, se logren realizar más implantes en más áreas del cerebro y con más información neuronal. Al tratarse de una técnica tan delicada y que requiere de tanta precisión, es físicamente imposible que la conexión de estos micro hilos se logre por el hombre, por eso Neuralink está desarrollando un sistema robótico con el que el neurocirujano pueda conectar los hilos exactamente donde deben ir.Te puede interesar: ¿Qué son los sistemas ATS y por qué es importante tener una hoja de vida que los supere?
Este tipo de tecnología podría en un futuro tratar enfermedades como el párkinson o el alzheimer, además de permitir el control de prótesis robóticas solo con el pensamiento. Hasta ahora, los avances de Neuralink han sido limitados pero muy importantes. Por ejemplos se logró predecir los movimientos de un cerdo que convivió con el chip durante dos meses y medir sus reacciones cuando se le puso a oler comida. Otro experimento se llevó a cabo en un mono que a través del implante logró controlar un videojuego. Investigadores han demostrado que con el uso tecnologías similares varios pacientes han logrado controlar cursores de computadoras, prótesis robótica y sintetizadores del habla, tal cual lo hacía, por ejemplo, el físico teórico Stephen Hawking. Sin embargo, al ser sistemas que cuentan con no más de 256 electrodos, sus alcances han sido limitados. Por eso uno de los objetivos de Neuralink es ampliar ese número y así poder recopilar información de un mayor número de neuronas estimulándolas de forma segura y duradera mediante un procedimiento simple y automatizado a lo largo de varias áreas del cerebro. Entre estas áreas están el córtex visual y auditivo, el sistema somatosensorial, y el córtex motor lo que permitiría manipulación de objetos a través del pensamiento. Actualmente, Neuralink no ha desarrollado pruebas en humanos, pero recientemente la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos, (FDA por sus siglas en inglés), recibió la documentación necesaria por parte de Neuralink para determinar si pueden adelantarse este tipo de pruebas. Como objetivo a largo plazo se espera que las interfaces cerebro-computadora estén disponibles para el público general y se integren como tecnología imprescindible en la vida diaria. Si las investigaciones y experimentaciones de Neuralink tienen éxito, en un futuro este tipo de tecnología estará disponible para el público general y se integrará a la vida diaria de los seres humanos, tal como ocurre hoy con los dispositivos móviles que en un principio solo estuvieron en la cabeza de quienes se dedicaban a la ciencia ficción.
