Nacido en la capital antioqueña de 1956, con 68 años aún parecía joven para irse. No conforme, lo hizo únicamente después de haber compartido con el mundo su profundo conocimiento sobre la realidad de su país y la vida que se encuentra más allá de las selvas; el nido de humanidad incomprendida que yace detrás de los ojos de la guerra.
Un profesional con entereza, que se desempeñó como periodista en diferentes medios colombianos y ejerció como reportero en otras cadenas internacionales, como Prensa Latina de Cuba o La Jornada de México. En 2005 también tuvo la oportunidad de convertirse en el fundador y primer director del Canal Telesur de Venezuela.
No obstante, su corazón siempre lo trajo de regreso a la tierra por la que tanto luchó. Recorriendo el país sin cansancio, Botero conoció la realidad del conflicto armado y, con ello, una perspectiva prácticamente desconocida del país; un hombre que logró el acceso a lugares y regiones que de alguna manera nadie más tenía.
Un legado que permanecerá por mucho tiempo
Colombia se despide del hombre; mismo que fue esposo, hijo, amigo y colega. Pero también del periodista, del cronista, del valiente, del caminante... del ser humano.
Criticado por diferentes sectores de la derecha colombiana, Jorge Enrique nunca se dejó intimidar y le mostró al mundo el rostro humano de la guerra que nadie más se había atrevido a revelar.
Hay muchos colegas que sencillamente me califican como ‘el periodista de las FARC’... Pero yo me he atrevido a ir al otro lado y ellos no se han atrevido.
Durante su homenaje póstumo, colegas del antioqueño afirmaron que con su trabajo logró conocer de una forma más humana a la gente que hacía parte del conflicto, en su estado más puro.
Afirmaron también que cuando Botero conoció a esa gente, ”a esa humanidad que conformaba a esos grupos guerrilleros” teniendo acceso a la vista de una perspectiva diferente, “entendió la magnitud del problema en el que estamos metidos al no reconocernos como colombianos y como seres humanos.”
Esta mañana estaba revisando mis archivos y parece increíble que yo haya podido andar tanto por las selvas, por las montañas.
Las acciones más destacables de Botero para la paz de Colombia:
Cobertura del conflicto armado: Botero fue uno de los pocos periodistas que logró tener acceso directo a las guerrillas de las FARC-EP. Sus reportajes y documentales brindaron una mirada desde el interior de los grupos armados, lo que ofreció una perspectiva más amplia sobre el conflicto. Su trabajo sigue siendo fundamental para humanizar las historias de las personas involucradas, tanto de los guerrilleros como de las víctimas.
jorge Enrique Botero fue un gran y verdadero periodista. Que descanse en paz.
QDEP. Un abrazo a todos sus familiares. pic.twitter.com/pRyxqCNnsc— Gustavo Petro (@petrogustavo) August 31, 2024
Documentales sobre el conflicto: Jorge Enrique realizó varios documentales importantes que han explorado la realidad del conflicto armado en Colombia. Uno de los más conocidos es "Las FARC desde adentro", que muestra la vida de los guerrilleros y las dinámicas dentro de la organización armada. Por medio de este largometraje, buscó sensibilizar a la opinión pública sobre la complejidad del conflicto y la necesidad de encontrar soluciones pacíficas.
Testigo en el intercambio humanitario: en 2008 fue testigo clave en la liberación de secuestrados a manos de las FARC, incluyendo la de la excongresista Clara Rojas y la de la ex parlamentaria Consuelo González de Perdomo. Su labor en este contexto no solo fue informativa, sino que contribuyó a la mediación y la creación de confianza entre las partes involucradas.
Participación en debates sobre paz: por medio de sus escritos, conferencias y participaciones en medios de comunicación, Botero nunca ocultó su compromiso activo en el diálogo como camino para la resolución del conflicto. Criticó las posturas intransigentes de diversos sectores de la opinión pública y la política colombiana, y promovió un enfoque incluyente para la construcción de la paz en Colombia.
Jorge Enrique Botero ha jugado un papel fundamental para la visualización de diferentes perspectivas del conflicto colombiano, especialmente las que no suelen ser representadas en los medios convencionales.
Su trabajo seguirá ayudando, aún después de su muerte, a promover la comprensión y el diálogo, lo cual es crucial en un país que busca construir una paz duradera tras décadas de violencia.
Caracterizado por su estilo directo y comprometido con las historias que narró, y brindando una perspectiva distinta a la cobertura mediática tradicional del conflicto colombiano, es preciso reconocer el aporte de Botero en la construcción de La Paz. Sus acciones quedarán en la memoria histórica de un país que anhela paz, la misma paz por la que tanto trabajó.
